lunes, junio 21, 2004

¡Se viene el porno soft católico!

Quienes seguimos la trama de Padre Coraje, nos hemos visto sorprendidos por un curioso fenómeno: un erotismo sublimado, con una particular inclinación a lo religioso. Así es que, entre lengüetazos y toqueteos varios de los personajes secundarios (que por cierto son los únicos que tienen alguna escena de sexo de vez en cuando), lo más fuerte que se ha visto es a Nancy Dupláa tomando lascivamente la hostia, o a Facundo Arana lavándole los pies con fruición. Luego de las revolcadas de Resistiré y Soy Gitano, la televisión abierta se inclina por la sugestión y la imaginación (como en las películas porno soft, los personajes pasan más tiempo imaginando encuentro sexuales que teniéndolos). Quién lo iba a decir... ¡Hostias!